sexta-feira, 26 de abril de 2013

Celular traz risco. Sabia?


Esta es una noticia típicamente ignorada por los grandes medios, que reciben generosa publicidad de los fabricantes de teléfonos celulares y tecnología hogareña. Incluso la aparición de un nuevo modelo de teléfono celular la convierten en una “noticia” que aparece en los programas informativos de TV de todo el mundo. Sin embargo, unos cuantos medios independientes, científicos o alternativos le prestaron atención, como Devra Davis, del Huffington Post, bajo el título “Radiación de teléfonos celulares: ¿es peligrosa?” (1 de marzo 2011).

El Proyecto Censurado rescató esta información, validada el 9 de abril por la Fundación Internacional Libertad de los Medios, bajo el titular “Investigación aclara peligro del teléfono celular”:

El uso del móvil es tan común que la mayoría de nosotros no considera que sea un riesgo, a menos que provoque distracción en la conducción de un vehículo. Sin embargo, estudios recientes sugieren otra cosa, especialmente para los más vulnerables: los niños aún no natos.

Se ha demostrado que la exposición prenatal a la radiación del teléfono celular produce permeabilidad en la barrera hemato-encefálica y daño en el cerebro, hígado y ojos. Puede estar relacionada con trastornos neuro-conductuales cada vez más prevalentes, como el TDAH (perturbación del comportamiento frecuente en niños).




La radiación del teléfono celular también genera alteraciones en la morfología del esperma, su motilidad, viabilidad y recuento. Incluso, para sujetos que no son particularmente vulnerables, la exposición crónica resulta arriesgada. Los estudios demuestran que el riesgo se multiplica en ciertos tipos de cáncer, incluyendo leucemia, para usuarios de celulares de más de diez años, a una tasa diaria intensa. Los estudios han llegado a mostrar el desarrollo de tumores en la glándula salival del cerebro que significativamente se producen con frecuencia mayor en el lado de la cabeza en que predominantemente se usa el teléfono celular.

Por el contrario, una serie de estudios financiados en gran parte por la industria, sugieren que estas “coincidencias” no son concluyentes. Sin embargo, muchos de esos estudios no se sostienen con una observación más estrecha, que muestra graves fallas en el cálculo de riesgos. Empero, son la base de la afirmación de que los teléfonos celulares son seguros, discurso que protege a la industria de un examen más detenido y costosos procesos de rediseño de sus productos. Una mayor preocupación pública debería impulsar la innovación en la industria para elaborar artículos más seguros y mejores.

¿Qué hacer? Las formas más efectivas de minimizar el riesgo recomiendan: (1) mantener una cierta distancia entre el teléfono celular y la cabeza mediante el uso de un auricular, altavoz del teléfono o mensaje de texto, (2) guardar el teléfono en algún lugar distinto a los bolsillos de la ropa, como una mochila o bolso, para proteger la función del órgano y la salud reproductiva, y (3) limitar su uso en situaciones de baja señal, ya que la radiación aumenta cuando la señal es débil o está bloqueada

Nenhum comentário:

Postar um comentário

deixe aqui seu comentário